Los dermatólogos lo dejaron claro: para cuidar la piel del sol, no basta con ponerse crema. La protección física es importante. Es decir, evitar estar muchas horas expuestos, ponerse a la sombra, usar anteojos, cubrirse con ropa y que no falte un buen sombrero. Este último es un complemento clave para resguardar una de las zonas más expuestas del cuerpo: la cabeza.

Con motivo de generar conciencia para protegernos de los daños del sol, este sábado 5 de noviembre el Paseo con Sombreros Buenos Aires partirá desde el Monumento a San Martín de la Plaza General San Martín y se lucirá con un recorrido arquitectónico ideado por la arquitecta Adriana Bianchedi.

Se tata de la versión porteña de la Passejada amb Barret (Paseo con Sombrero) de Barcelona que ya lleva realizadas 18 ediciones. El objetivo del evento es estimular y difundir la concientización de la protección de la piel. Especialmente, hacerlo en el contexto de una agradable caminata y un brindis al final de la misma.

Con el auspicio de las embajadas de Australia y Chile, el Museo de la Historia del Traje, la Asociación Argentina de Oncología Clínica, la galería Cecilia Caballero Arte Contemporáneo y la doctora Alejandra Ciappa, el evento ha ido ganando en popularidad con el transcurso de los años.

“Todas las asociaciones de dermatología recomiendan el uso del sombrero, sobre todo cuando somos testigos de las fluctuaciones de espesor de la capa de ozono que nos protege de los rayos ultravioletas. Para evitar las lesiones en la piel del rostro y cuello hay que recuperar el hábito del uso del sombrero”, sostuvo en diálogo con Infobae el artista visual y organizador del evento Marcos Shayo.

Shayo, fundador de la firma Productos Banus y miembro de la Asociación Argentina de Inventores, explicó que “en ese sentido, desarrollaron distintas estrategias que vinculan la salud con el diseño y la moda. En el año 2013 y hasta el 2017 realizamos cuatro concursos de diseño de sombreros internacionales. En esta oportunidad, sumamos a este paseo dos novedades hermosas: una visita guiada arquitectónica y un brindis en una galería de arte que generosamente nos abrió sus puertas”.

Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), para obtener una mayor protección del sol, los sombreros de ala ancha que cubren la cara, las orejas y la parte de atrás del cuello son los mejores. “Una tela de tejido muy cerrado, como lona, funciona mejor para proteger la piel contra los rayos UV. Deben evitarse los sombreros de paja con orificios que dejan pasar la luz del sol. Y un sombrero oscuro puede ofrecer más protección contra los rayos UV”, aseguran.

El cáncer de piel es el tipo más común de los cánceres en el ser humano. Una de sus causas más importantes es la exposición al sol sin protección o a las camas solares. Otras causas menos frecuentes son la exposición repetida a rayos X, presencia de cicatrices por quemaduras severas, exposición ambiental al arsénico y antecedentes familiares de cáncer de piel.

La forma más eficaz para prevenir el cáncer de piel es la educación: saber cómo, cuándo y cuánto exponernos al sol. El cáncer de piel es curable en la mayoría de los casos, por eso es importante hacerse exámenes propios constantes y visitar al dermatólogo por lo menos una vez al año como medida de prevención.

“El cáncer de piel puede ser originado por las células de la epidermis (los queratinocitos), esto es conocido como cáncer de piel no-melanoma, que es el tipo de cáncer más frecuente; o puede originarse en los melanocitos (melanoma), siendo éste el más agresivo de los cánceres cutáneos”, alertó en una entrevista con este medio Graciela Manzur, jefa de la División Dermatología del Hospital de Clínicas.

Y concluyó: “Si bien sólo el 5% de los cánceres de piel son melanomas, ocasionan el 90% de todas las muertes por cáncer cutáneo en el mundo. Es importante controlar la piel en forma periódica para detectar a través de la misma lesiones tempranas que permitan hacer un tratamiento oportuno y curativo”.